Llegamos al fin estimado lector, pero no se asuste, solo al fin de la serie, porque este blog tiene mucho para dar todavía.
Este simpático personaje nos presenta la vía de escape de la libertad que, en mi opinión, es la más obvia y a la vez la más presente entre las personas, la Conformidad Autómata. Con un nombre que se cae de maduro, este camino de salida no necesita gran explicación ya que podemos verlo por ahí a diario con todo este cuento contemporáneo de las tribus urbanas. Floggers, Skaters, Heavies, Otakus y otro sin fin de etiquetas sociales que los jóvenes, en general, enarbolan como estandarte orgullosos de ser parte de la masa y el paradigma general, mostrándole al resto del mundo como están “adentro” y han abandonado su pensamiento individual.
Ahora usted se estará preguntando “¿Que me quiere decir con todo este cuento de a teoría de Fromm?” “A este se le acabó el repertorio y está choreando de algún libro barato de psicología”. Le digo que no, esta serie intenta mostrarle que el sistema y el entorno no son la única amenaza a nuestra libertad, porque aunque a veces nos cueste notarlo, nosotros mismos somos los primeros en quitárnosla.
La conclusión de esto es sencilla, y reiterada a mi parecer, sea usted mismo, deje de abandonar su propia identidad, su forma de pensar, su individualidad bajo banales etiquetas como tribus, ropas, música, y más. Usted tiene un nombre que lo identifica, o un número de documento si aun quiere ser más extremo, pero el hecho final es que usted no es nada más, y nada menos, que usted mismo.
Lo espero la próxima semana con un nuevo tema, esté atento.
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